Casa nueva en el pueblo: esto es lo que no te puede faltar
Mis raíces rurales son las que heredé de mis padres. Es decir, yo era de esos chicos que cuando iba al pueblo desde la ciudad se lo pasaba pipa. Eso sí, nunca dejaba de ser el forastero para los chicos y chicas autóctonos de ahí. Ya sabemos cómo son los pueblos. Pero no me importaba. Yo lo pasaba tan bien