Los beneficios de la fisioterapia para los adultos mayores están bien comprobados. Ya sea para prevenir caídas, tratar trastornos del equilibrio o controlar el dolor, la fisioterapia desempeña un papel fundamental en la mejora de la calidad de vida de los pacientes.
¿Y si todos estos beneficios estuvieran disponibles desde la comodidad de tu casa? ¡Esa es la idea de la fisioterapia en casa!
En este artículo, conocerás más sobre la fisioterapia a domicilio y sus numerosos beneficios para las personas mayores.
¿Qué es la fisioterapia domiciliaria?
Ya sean fisioterapeutas o tecnólogos en fisioterapia, los profesionales de la fisioterapia pueden ofrecer tratamientos y seguimientos yendo a su domicilio.
Lo que necesitas saber:
- La fisioterapia domiciliaria se ofrece tanto en el sector privado (por ejemplo una clínica privada) como en el público (por ejemplo, un centro local de servicios comunitarios). Sin embargo, los criterios de accesibilidad en el sector público son diferentes y más selectivos que en el privado.
- Los profesionales de fisioterapia que trabajan de forma privada a domicilio pueden ofrecer sus servicios en establecimientos privados y públicos, ya que esta atención privada es aceptada en todos los establecimientos (asilos, hospitales, etc.).
- Todos pueden tener acceso a la fisioterapia a domicilio: personas mayores, niños, madres, deportistas, trabajadores, víctimas de accidentes de tráfico, veteranos, etc.
- Los tratamientos que se realizan en casa son los mismos que los que se ofrecen en la clínica.
- La mayoría de las compañías de seguros privadas no diferencian entre el tratamiento brindado en una clínica privada y el tratamiento brindado en el hogar.
Personas mayores y fisioterapia domiciliaria
Para los adultos mayores, la fisioterapia puede ayudar a tratar y prevenir muchos problemas. Los objetivos principales son permitir que estos pacientes se mantengan activos, limiten el dolor y mantengan la mayor independencia posible para retrasar la necesidad de ingreso en una residencia u hospitalización. Estos objetivos son los mismos tanto si el tratamiento se realiza en una clínica como en el domicilio.
Así, se pueden proponer múltiples intervenciones por parte del profesional de fisioterapia:
- Prevención de caídas.
- Prevención del desacondicionamiento tras la falta de actividad debido al dolor, cirugía u otros problemas que suelen enfrentar los adultos mayores.
- Tratamiento y alivio del dolor crónico o agudo.
- Tratamiento del vértigo o mareo.
- Seguimiento después de un accidente cerebrovascular o una cirugía cardíaca.
- Manejo del dolor y ciertos síntomas de enfermedades crónicas como el Parkinson, esclerosis múltiple, esclerosis lateral amiotrófica, etc.
- Solicitudes de pegatinas de estacionamiento.
- Solicitudes de transporte adaptado.
- Y otros.
Los profesionales de la fisioterapia también pueden brindar asesoramiento y apoyo a los cuidadores y familiares del paciente. Este asesoramiento les ayuda a estar preparados para ayudar al paciente en su día a día y a continuar con su tratamiento.
¿Cuáles son los beneficios de la fisioterapia domiciliaria para las personas mayores?
1. Atención accesible
En términos generales, la fisioterapia domiciliaria facilita enormemente el acceso a la atención para:
- Personas que tienen dolores intensos o limitaciones físicas que les impiden moverse con normalidad (subir a un coche, salir de un coche, estar de pie en el transporte público, etc.).
- Personas que tienen dificultades para conducir.
- Personas que no necesariamente tienen acceso a un vehículo o cuya familia no puede escapar fácilmente.
2. Menos estrés
En el contexto de la atención domiciliaria, no tener que desplazarse a la clínica les alivia mucho el estrés. Ya no necesitan organizar su viaje (reservar un taxi, pedirle a la familia que venga, administrar su tiempo, etc.) ni preocuparse por llegar tarde o perder su cita.
El profesional Rafael Guerra expone que los pacientes mayores tienden a limitar su tratamiento debido al estrés del traslado a la clínica y la organización que conlleva. Entonces prefieren soportar el dolor y esperar.
3. Una relación privilegiada con el profesional
Una de las principales ventajas de las visitas a domicilio es que el fisioterapeuta puede centrarse exclusivamente en su paciente. Si bien en una clínica privada es muy atento, a veces el fisioterapeuta atiende a varios pacientes a la vez. Esto no ocurre en la atención domiciliaria, ya que el fisioterapeuta está solo con su paciente.
Estas condiciones de tratamiento evitan el estrés tanto del paciente como del profesional. La Sra. Paquin señala que las personas dedican más tiempo a explicar sus problemas. También les da menos vergüenza hacer preguntas y hablar sobre ciertos temas que podrían haberles incomodado en otro contexto.
Los pacientes siempre quedan muy contentos de ver a su profesional y que rápidamente se establece una relación de confianza.
4. Sesiones más efectivas
Durante una sesión en casa, las condiciones del paciente son diferentes a las de una sesión en clínica. No hay presión ni fatiga asociadas con la preparación (vestirse, maquillarse, calzarse, etc.), los viajes, la gestión del tiempo, etc. Por lo tanto, el paciente no pierde energía y su cuerpo está completamente descansado. El fisioterapeuta puede entonces realizar un tratamiento más efectivo. Estas condiciones también permiten al paciente estar más relajado y concentrado, ya que no se distraerá con nada más. El efecto del tratamiento también durará más.
Finalmente, el profesional no necesita preocuparse por el regreso del paciente a casa, pues sabe que permanecerá tranquilo en casa al finalizar la sesión. Así, puede trabajar todas las partes de su cuerpo sin preocuparse por los movimientos que deberá realizar para regresar a casa.
5. Atención y asesoramiento adaptados al entorno del paciente
Una de las características únicas de la fisioterapia domiciliaria es que el profesional puede observar al paciente en su propio entorno. Esto le proporciona una visión más integral del paciente y una mejor comprensión de su entorno y vida cotidiana. El profesional puede entonces identificar los factores de riesgo que rodean a la persona, así como ciertos malos hábitos asociados con la distribución de su hogar.
De esta manera, puede brindarle numerosos consejos para mejorar su situación y prevenir accidentes cotidianos, como las caídas. ¡Es, por lo tanto, un sistema de prevención personalizado muy eficaz!
Además, la presencia del fisioterapeuta en el domicilio del paciente le permite hacer preguntas sobre su entorno. Así, puede contarle sus dificultades para levantarse de la silla, salir de la bañera o adoptar una buena postura al dormir. El fisioterapeuta puede pedirle que repita ciertos movimientos diarios para mejorar su postura y encontrar soluciones adecuadas.
6. Ejercicios más fáciles de integrar en la vida diaria
Al tratar a pacientes en casa, muchos comentan que les resulta más fácil integrar los ejercicios en su rutina diaria. De hecho, los ejercicios propuestos por el fisioterapeuta se explican en el entorno del paciente y se contextualizan en su vida diaria. El fisioterapeuta le muestra cómo usar la mesa de su sala, una silla o incluso un espacio en la cocina para realizar los ejercicios. De esta manera, cuando quiera repetirlos, tendrá un punto de referencia.
¿Cómo funciona una sesión de fisioterapia a domicilio?
Cuando un fisioterapeuta ofrece tratamientos a domicilio, trae todo el material necesario según el caso: camilla, TENS, ultrasonidos, bandas elásticas, cojines de equilibrio, etc.
En términos generales, ya sea su primer tratamiento o un seguimiento, las sesiones de fisioterapia en casa se llevan a cabo en 3 etapas.
Paso 1: Discusión sobre su salud y necesidades
En primer lugar, el fisioterapeuta hablará con usted para que pueda explicarle su situación (situación inicial, evolución del problema, síntomas, etc.) y sus necesidades. Aprovechará esta oportunidad para preguntarle sobre la evolución de su tratamiento.
Paso 2: Tratamiento
El fisioterapeuta inicia el tratamiento. Es importante tener en cuenta que no es obligatorio usar una camilla en casa. Si se siente más cómodo en la cama o sentado en una silla, debe informar al fisioterapeuta.
Paso 3: Comentarios sobre su tratamiento y preguntas
Una vez finalizado el tratamiento, el fisioterapeuta se tomará el tiempo necesario para explicarle el tratamiento y responder a cualquier pregunta que pueda tener. Si tiene alguna nota para usted, se tomará el tiempo de anotarla y explicársela. También podrá hablar con los cuidadores (o familiares). En el caso de una residencia de ancianos privada, el fisioterapeuta podrá, con su consentimiento, hablar con el personal de enfermería para revisar su estado y tratamiento.
Por lo tanto, la fisioterapia domiciliaria ofrece numerosas ventajas tanto para el paciente como para el fisioterapeuta.