¿Qué es la gingivectomía?

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Algunas personas no están contentas con su sonrisa, porque muestran demasiado las encías al sonreír. Es lo que se denomina la sonrisa gingival. En este caso es aconsejable recurrir a la gingivectomía, para mejorar el pronóstico de pacientes que padecen enfermedad periodontal o lesiones cariosas.

Los profesionales de Clínica Dental La Chicuela, una clínica dental en Cáceres, informan que «consiste en una sencilla operación en la cual recortamos ligeramente la encía que rodea a los dientes”.

Gracias a la gingivectomía el paciente puede lucir una sonrisa notablemente más armónica y estética. Es una operación que se realiza bajo anestesia local, por lo que el paciente no percibirá molestias.

El odontólogo realiza la operación con un bisturí eléctrico para conseguir un sangrado gingival mínimo. El objetivo de esta operación es evitar que la encía retorne a la posición original.

La gingivectomía está recomendada para tratar la hiperplasia, que es una afección gingival que consiste en un crecimiento del tamaño de las encías, bien a causa de los cambios hormonales durante el embarazo o la ingesta de determinados medicamentos.

Los pacientes que padecen periodontitis y presentan bolsas periodontales de más de 3 milímetros de profundidad al sondaje, también pueden recurrir a esta operación.

Además, está recomendada para las personas con bruxismo porque este hábito hace que los dientes se vuelvan más pequeños, exponiendo más las encías. Esto ocurre porque el paciente tiende a apretar o rechinar los dientes de arriba con los de abajo, por lo que se produce un desgaste dental.

La sonrisa gingival afecta la autoestima del paciente, porque su sonrisa no es armónica, es decir, muestra una encía muy prominente en relación al tamaño de sus piezas dentales.

Otra de las ventajas de la gingivectomía es que es un procedimiento sencillo e indoloro, por lo que es un tratamiento mínimamente invasivo y la operación dura apenas 15 minutos. A continuación, te explicamos cómo se lleva a cabo la gingivectomía:

– Antes de la operación el dentista realizará un estudio estético de la sonrisa del paciente, para saber cómo es el estado de su salud bucodental.

-El día de la operación el especialista dibujará una línea en que se realizará el contorneado gingival y se eliminará el tejido gingival por la línea de contorneado.

-Para proteger la zona se utiliza un cemento periodontal.

Aunque si el paciente presenta un maxilar superior excesivamente largo se puede realizar una cirugía ortognática.

El especialista coloca los huesos de la cara en una posición adecuada, por lo que lleva a cabo un movimiento del maxilar hacia la parte superior. Con esta intervención consigue acortar la encía y se realiza bajo anestesia general.

Causas de la sonrisa gingival

No hay una causa concreta de la sonrisa gingival, pero puede deberse a varios factores, que son los siguientes:

– El diente está cubierto por mucho tejido gingival y esto ocasione el problema.

-También pude ser por la genética, es decir, que el labio superior puede ser demasiado fino y no cubrir lo suficiente la encía.

-Que el paciente tenga una mandíbula hundida o muy pequeña.

-Acortamiento de las piezas dentales por desgaste.

– También puede ser por una causa muscular, es decir, que el músculo facial tiene hasta un 20% más de capacidad para elevar el labio.

¿Cuáles son los beneficios que tiene la gingivectomía?

Es un tratamiento que aporta múltiples beneficios, ya que permite armonizar la sonrisa de los pacientes.

Mejora la seguridad, la autoestima y la confianza. La gingivectomía frena la afección de patologías bucodentales como las enfermedades periodontales o la fibrosis gingival.

¿Cómo conseguir una correcta cicatrización?

Después de la operación el paciente tomará analgésicos para eliminar las molestias. La revista Mejor con Salud informa que al cabo de una semana empieza a desaparecer la inflamación del tejido gingival, y después de dos semanas las encías ya suelen estar recuperadas.

La higiene bucodental es muy importante porque evitar posibles complicaciones postoperatorias. El mismo día de la operación el paciente debe lavarse los dientes después de cada comida con un cepillo quirúrgico, para evitar la formación del coágulo a lo largo del margen gingival.

El paciente no podrá tomar alimentos demasiado ácidos o picantes, porque pueden irritar las encías. También tiene que intentar no fumar ni tomar bebidas alcohólicas.

Otra de las recomendaciones que el paciente debe seguir para evitar la inflamación es que no puede realizar esfuerzos ni actividad física. Tampoco puede retirar los vendajes hasta que el odontólogo los cambie.

Debe evitar tocar la herida y si tiene molestias, además, de los analgésicos puede colocar frío en la zona. Es fundamental acudir al odontólogo para comprobar el estado de la boca.

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